MINOENTENDER

Ultimamente no me he clavado en la música nueva. No es que no haya cosas interesantes volando por ahí, de hecho hay varios discos nuevos que he disfrutado mucho, pero los discos viejos de R.E.M.  tienen cautiva mi atención. No los discos viejos-viejos ( Murmur , Reckoning ) más bien los discos noventeros viejos ( Monster , New Adventures in Hi Fi ) New adventures  siempre ha sido un consentido mío, no sólo por las canciones: todo el arte de ese disco me encanta, y de cierta manera me ha influenciado a la hora de hacer mis poquitas y desapercibidas películas. Hace poco conseguí (por fin) la edición limitada de ese disco y fue un placer hojearla mientras la música invadía la habitación. En varios sentidos satisfizo un anhelo mío de juventud. Expandio un objeto que era ya de por si hermoso y lo hizo una pieza de arte. Pero ese disco no me sorprendio, yo ya sabia que era bueno. Es el Monster el re-descubrimiento que me ha dejado sin aliento.  Cuando lo compré allá por los n...

Lo entiendo cuando andan en sus rancherías, arreando vacas, pisando alacranes  y saltando estiércol.... pero, ¿en una oficina de las lomas?.... nomas no le encuentro sentido. ¿cual es el asunto con los "hombres" y sus botas?.  En serio, ¿botas puntiagudas de piel de  víbora en la oficina?, ¿haciendo juego con un pantalón de vestir gris y camisa de rayitas? ¿Es que acaso llegan al trabajo montado un corcel blanco?. ¿El tapete del despacho es un hábitat hostil? Y luego que sean todas largas y puntiagudas como babucha... ¡eso que!, ¿Están tratando de compensar alguna carencia? Yo calzo del 12 y sólo puedo pensar en lo inconveniente que es. Yo TENGO  que usar zapatotes ¡y estos cuates se los ponen por puro gusto! ¿Gusto de qué?, ¿es que quieren combinar su calzado con un cinturón blanco?, ¿que sigue? ¿hombres con bolso?... ah no, de esos ya hemos visto la pioja y yo... pero no traían botas... al menos no de ranchero. Por favor, por caridad, alguien explíqueme.

Desde hace casi un año pasan el " Late Late show with Craig Ferguson " por cable, y casi de manera instantánea me enamoré del programa, de su sencillez, de lo directo de su humor de pastelazo, y de la inteligencia en su resolución. Para tener un buen late show hay 2 cosas indispensables, un gran anfitrión y buenos escritores. Puedes prescindir de las escenografías fastuosas y de los mega-invitados, siempre y cuando el tipo que está frente a cámara sea elocuente, sagaz y divertido. David Letterman y Conan O´brien son brillantes y tienen un timing cómico impecable, pero sus programas dependen mucho de la producción y de la fama de sus invitados. Ferguson determina el ritmo y la dirección de todo el show, sin que sea una cosa egocentrista. Su flow lleva el programa durante una hora a buen termino, independientemente de quien esté de invitado, y de que la estructura sea la misma que la de todos los otros late night shows de Estados Unidos. Si tienes al anfitrión correcto, tod...