#comoeducasatushijos o una dosis extrema de pesimismo
Como siempre, me enteré muy tarde del entretenidísimo #lordmelapelas. Seguro ya todos vieron los videos, siguieron la noticia y están al tanto de todos los pormenores. Yo sólo vi los videos, y entendí de la situación que el hijo de alguien, sintiendose por encima de todo y de todos, hizo despliegue del comportamiento y status, que desde nacido, sus padres le han conferido, permitido, transmitido, inculcado. También encontré poco sorprendente la obediencia ciega de su séquito de guaruras, que arriesgando su libertad, su integridad física, su imagen pública, acudieron incondicionalmente a complacer los deseos revanchistas de monseñor melapelas. Después de todo, los sicarios de la droga tienen el mismo espíritu complaciente e incondicional, y no es que sean agentes importados de Suecia o Rusia, son mexicanísimos, y esa amoralidad está sembrada en nuestro ADN. Todas estas frases como "el que no tranza no avanza" o "primero chingar a que me chinguen" que todas las ...