chomp chomp!

Supongo que lo mas difícil de hacer dieta es el asunto social. La comida (y la bebida), antes que un sustento, es una manera de interactuar, de crear vínculos, de celebrar y compartir; y si súbitamente, por una deficiencia física, tus opciones alimenticias se reducen en un 70% pues necesariamente se genera un conflicto: Ya no puedes brindar con tus amigos o compartir una torta de tamal con tus compañeros de rodaje. Ver una película palomera sin palomitas no tiene el mismo chiste. Ir a la tiendita es absolutamente absurdo, pues básicamente no hay un solo producto que no contenga (o se convierta) en azúcar, y ni empecemos con las donas, los helados y las celebraciones que involucran pan o pastel de algún tipo.

Luego viene el asunto de los cambios… que es casi como otra pubertad: Tu ropa deja de quedarte bien, todo en ti empieza a oler y verse de otra manera, te da hambre a otras horas, debes acomodar todo tu horario para prepara la comida que si puedes comer y comerla a tus horas, etc. Es una lata, no entiendo mucho a la gente que hace estas cosas por gusto… y empiezan a caerme medio gordas las actrices que salen en la tele diciendo: “No darling, pero si yo como de todo, a-dios-gracias chulis tengo un metabolismo maravilloso y por mas que lo intento no subo de pesoooooooo”. Mmmmm… siiii como no!

Todo esto viene a colación (jeje) porque el sábado pasado tuve mi ultima consulta con el doctor, mi azúcar esta en 83 mg/dl, mi hemoglobina glicosilada en 5.3% y mi colesterol en 150.1 mg/dl, en pocas palabras ya estoy chido chido chido, todo sólo con hartísimo ejercicio y una dieta salvaje. Supongo que estoy listo para recuperar mi vida social, sólo que antes debo ir a festejar al Krispy Kreme mas cercano; quiero averiguar cuantas donas debe comer uno antes de que el corazón haga alto total!!!. En una de esas ya tengo un metabolismo maravilloso chulis!!!! Ohhh yeah, bring the sweets!